Inicio Salud y bienestar la psicología ¿Por qué se nos quedan pegadas las canciones en la cabeza ?

¿Por qué se nos quedan pegadas las canciones en la cabeza ?

541
0
¿Por qué se nos quedan pegadas las canciones en la cabeza ?

¿Alguna vez te has encontrado tarareando una melodía que no puedes sacar de tu cabeza, sin importar cuánto lo intentes ? Lo más probable es que la respuesta sea un rotundo sí. Este fenómeno intrigante y a menudo frustrante se conoce como «vers d’oreille» o «Earworms», y nos ocurre a casi todos nosotros. Pero, ¿alguna vez te has preguntado por qué algunas canciones parecen repetirse en nuestra cabeza una y otra vez ? Acompáñanos en este fascinante viaje para entender mejor este fenómeno musical.

El fenómeno de las canciones pegadizas: una exploración

¿Qué son los ‘Earworms’ ?

Los vers d’oreille o Earworms, término acuñado por un psiquiatra en 1979, hace referencia a esas canciones persistentes que a menudo surgen en nuestra mente durante actividades rítmicas como correr. Mencionadas incluso por el escritor Mark Twain en 1876, las canciones pegadizas son objeto de estudio de psicólogos, musicólogos y neurocientíficos.

Cómo surgen las canciones pegadizas

Estudios revelan que estas melodías suelen aparecer cuando realizamos alguna actividad rítmica, pues esta nos impone un tempo natural que provoca la emergencia de música rápida en nuestra cabeza.

Después de explorar el concepto del fenómeno de las canciones pegajosas, veamos ahora cómo nuestro cerebro contribuye a él.

La mecánica cerebral detrás de la repetición musical

El papel de la repetición

La repetición es un componente vital en el fenómeno de las canciones pegajosas. Según José León Carrión, profesor de neuropsicología, la repetición ha sido esencial para la supervivencia del ser humano, permitiéndonos crear rutinas necesarias para llevar una vida organizada.

Cómo funciona nuestro cerebro con la música

Nuestro cerebro tiende a almacenar información que se repite, como melodías musicales. Esta propensidad a recordar patrones y secuencias repetitivas explica por qué ciertas canciones pueden quedarse ‘pegadas’ en nuestras mentes.

Ahora bien, ¿qué hace que ciertos ritmos o melodías sean más atractivos o ‘pegajosos’ que otros ?

READ :  Los mejores alimentos grasos para una buena salud

El irresistible encanto de la familiaridad melódica

Tres criterios clave identificados por los investigadores

Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Saint Andrews identificó tres características claves que hacen que ciertas canciones queden grabadas en nuestra memoria: ritmos repetitivos, alternancias entre momentos tranquilos y rápidos y una impresión duradera tanto de la melodía como de las letras después de escuchar solo una vez tales canciones.

Afinidad natural hacia lo familiar

Nuestra mente se siente cómoda con lo familiar. Por tanto, las canciones cuyas melodías o ritmos son similares a aquellos con los que ya estamos familiarizados tienen más probabilidades de convertirse en ‘earworms’.

Pero, ¿por qué algunas melodías nos persiguen más que otras ?

¿Por qué algunas melodías nos obsesionan más que otras ?

Diferencias en la estructura musical

No todas las canciones están diseñadas igual. Algunas poseen una estructura musical y un ritmo que las hacen ser más memorables y, por ende, más propensas a quedarse en nuestra cabeza.

Influencia de las letras

Las letras también juegan un papel importante. Las canciones con letras emotivas y con mensaje profundo tienden a resonar más con nosotros.

A continuación, examinaremos los efectos psicológicos de escuchar repetidamente una canción.

Los efectos psicológicos de escuchar repetidamente una canción

¿Es malo tener siempre la misma canción en la cabeza ?

Aunque tener constantemente una canción en la cabeza puede resultar molesto, no es necesariamente dañino para nuestra salud mental. De hecho, puede incluso ayudarnos a procesar emociones complejas.

El papel del estado emocional

Nuestro estado emocional actual puede afectar el tipo de música que se queda atrapada en nuestra mente. Cuando estamos felices, tendemos a recordar melodías alegres, mientras que cuando estamos tristes, recordamos música melancólica.

Si te sientes agobiado por una canción específica, veamos algunas estrategias para liberarte.

Saturado por una canción ? Estrategias para librarse

Escuchar la canción completa

Varias veces, escuchar la canción completa puede ayudar a «despegar» la melodía de nuestra mente.

READ :  Descubriendo la felicidad: práctica diaria para el desarrollo personal

Distracción mental

Otra estrategia útil es distraer nuestra mente con otras actividades que requieran concentración, como leer un libro o resolver un rompecabezas.

Ahora, profundicemos en el análisis de las canciones más pegajosas.

Análisis: ¿Cuáles son las canciones más pegadizas ?

Canción Artista
  • «It’s a Small World» Disney
  • «I Will Always Love You» Whitney Houston
  • «Don’t Stop Believin'» Journey
  • «Bohemian Rhapsody» Queen
  • «Hey Jude» The Beatles
  • Nuestras selecciones musicales pueden revelar mucho acerca de nuestra psicología. Dicho esto, exploraremos cómo nuestras playlists personales pueden reflejar tanto nuestro placer como nuestra fatiga musical.

    La psicología de nuestras playlists personales: entre placer y cansancio

    Nuestros gustos musicales y su relación con las canciones pegajosas

    A menudo, las canciones que elegimos para nuestras playlists son las que más tendemos a recordar, por lo tanto, es probable que estas se conviertan en ‘earworms’.

    La fatiga musical

    A veces, la repetición constante de una canción puede llevarnos a experimentar lo que se conoce como ‘fatiga musical’, una pérdida temporal del interés o disfrute de una determinada canción o género musical.

    Entendiendo la complejidad del fenómeno de las canciones pegajosas y cómo nuestro cerebro responde a ellas, llegamos al final de este viaje.

    Es fascinante descubrir los pormenores del fenómeno de las canciones pegajosas. Desde entender el papel crucial de la repetición hasta descubrir los efectos psicológicos de escuchar una misma melodía en bucle y conocer estrategias para deshacerse de esa canción persistente en nuestra cabeza. Sin duda, la música tiene un poder extraordinario sobre nosotros, influyendo no sólo en nuestras emociones sino también en nuestros procesos cognitivos. Así que la próxima vez que te encuentres tarareando esa misma melodía una y otra vez, ya sabrás por qué.

    4.1/5 - (11 votos)

    Como joven medio de comunicación independiente, Derrenteria necesita tu ayuda. Apóyanos siguiéndonos y marcándonos como favoritos en Google News. Gracias por tu apoyo.

    Síguenos en Google News !